El 14 de junio del 2012, el Parlamento Europeo aprobó una resolución por la que reclamaba unos controles más estrictos sobre las prótesis de mama. El objetivo era evitar la repetición de una situación como la producida por los implantes mamarios PIP (Poly Implant Prosthese), retirados del mercado en 2010.
El objetivo consistía en la creación de un registro nacional de implantes obligatorio en cada estado miembro y de un sistema de autorización de venta en toda la Unión Europea.
Este registro nacional de implantes ya está en marcha en nuestro país con la estrecha colaboración de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE).
Se pretende conseguir una armonización del funcionamiento de los Organismos Notificados con inspecciones periódicas en toda la cadena de suministro del producto sanitario, un incremento del control del mercado de dichos productos, un mayor número de informes de vigilancia por las autoridades competentes, la realización de inspecciones coordinadas de las instalaciones de fabricantes e importadores, y una adecuada vía de comunicación con absoluta transparencia en la notificación de incidentes adversos con la mediación y participación activa de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).
Con estas medidas se obtiene un mayor control sobre los implantes protésicos mamarios con la consecuente mejora en la protección de la salud y seguridad de las pacientes, evitando la repetición de incidentes adversos (caso PIP), mediante la recogida, evaluación y difusión de la información sobre los citados incidentes y la adopción de medidas correctivas apropiadas.