Lipoescultura

La liposucción es una técnica quirúrgica orientada a eliminar aquellos acúmulos de grasa que no han podido ser eliminados mediante dieta y/o ejercicio físico. No es un tratamiento para la obesidad ni para la pérdida de peso, sólo pretende modelar y armonizar el cuerpo. Es una técnica quirúrgica menos agresiva que otras cirugías plásticas  pero se realizará siempre en quirófano, bien de forma aislada o combinada. Consiste básicamente  en la aspiración de la grasa mediante la introducción de una cánula conectada a una máquina de vacío o una jeringa especial. El resultado del procedimiento dependerá principalmente de las condiciones de elasticidad de la piel.

El lipofilling es una técnica quirúrgica que consiste en injertar células grasas del propio paciente (grasa autóloga) con objeto de relleno de distintas áreas anatómicas. Puede utilizarse con fines estéticos para producir un aumento de volumen (principalmente facial), para corregir defectos derivados de traumatismos previos, o para mejorar las secuelas derivadas de otras cirugías previas (irregularidades tras liposucción o reconstrucción mamaria). El éxito de este procedimiento depende de la correcta manipulación de la grasa, de la vascularización del lecho donde se injerta y de la limitación del volumen injertado, motivo por el cual suele ser necesaria más de una sesión.